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EL ASEDIO A LA DEMOCRACIA: UN MENSAJE DE SOLIDARIDAD PARA WILSON BORJA, GUSTAVO PETRO Y MANUEL ROZENTAL (11 de Noviembre de 2005 17:31:15)
Esta semana recibimos la lamentable noticia de la planeación de atentados dirigidos contra los Representantes a la Cámara Wilson Borja y Gustavo Petro, así como del exilio del importante dirigente indígena Manuel Rozental. Un país en el cual el ejercicio de la oposición política, la denuncia y la lucha pacífica en favor de los sectores más vulnerables se pretende opacar a través de las armas es insostenible políticamente. Por esta razón, los hechos mencionados tienen una gran trascendencia y merecen toda la atención de la opinión pública.
La actividad de dirigentes políticos y sociales como Wilson Borja, Gustavo Petro y Manuel Rozental es imprescindible para Colombia. Los dos primeros ejercen una excelente labor legislativa acompañada de una brillante actividad de denuncia y control político. El tercero, ha sido un perseverante líder de la comunidad indígena en la ACIN, promotor de la consulta contra el TLC y de las protestas pacíficas indígenas en el Cauca.
La intensión de acallar sus voces por medios violentos es una demostración más de que la democracia en Colombia se encuentra asediada por la violencia. Esta situación es lamentable al igual que la actitud de indiferencia del gobierno colombiano ante tales hechos. A través de este medio deseo enviar a todos ellos un mensaje de solidaridad y de ánimo para que continúen con su valiosa y valiente labor.
El descubrimiento de los atentados contra los Representantes a la Cámara Wilson Borja y Gustavo Petro, así como el exilio del líder indígena Manuel Rozental, son una demostración más de la fragilidad y el estado de asedio en que se encuentra nuestra democracia.
Hace algunas semanas escribí en el blog acerca de la gravedad de los hechos en los que se vio envuelto el Senador Germán Vargas Lleras a raíz del atentado realizado en su contra. Infortunadamente, la situación de la democracia colombiana es cada día más precaria y hechos de esa naturaleza no cesan. En días pasados los medios de comunicación informaban acerca de las amenazas contra una Representante a la Cámara del uribismo, quien denunció la imposibilidad de realizar campaña en Cundinamarca como consecuencia de la presión de grupos armados.Esta semana recibimos la lamentable noticia de la planeación de atentados dirigidos contra los Representantes a la Cámara Wilson Borja y Gustavo Petro, así como del exilio del importante dirigente indígena Manuel Rozental. Un país en el cual el ejercicio de la oposición política, la denuncia y la lucha pacífica en favor de los sectores más vulnerables se pretende opacar a través de las armas es insostenible políticamente. Por esta razón, los hechos mencionados tienen una gran trascendencia y merecen toda la atención de la opinión pública.
La actividad de dirigentes políticos y sociales como Wilson Borja, Gustavo Petro y Manuel Rozental es imprescindible para Colombia. Los dos primeros ejercen una excelente labor legislativa acompañada de una brillante actividad de denuncia y control político. El tercero, ha sido un perseverante líder de la comunidad indígena en la ACIN, promotor de la consulta contra el TLC y de las protestas pacíficas indígenas en el Cauca.
La intensión de acallar sus voces por medios violentos es una demostración más de que la democracia en Colombia se encuentra asediada por la violencia. Esta situación es lamentable al igual que la actitud de indiferencia del gobierno colombiano ante tales hechos. A través de este medio deseo enviar a todos ellos un mensaje de solidaridad y de ánimo para que continúen con su valiosa y valiente labor.
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