LOS RETOS DE LA UNIDAD
Los retos para el Polo Democrático Alternativo son inmensos. Primero, es necesario superar la coyuntura para constituir un movimiento de largo plazo; segundo, debemos resistir a las tentativas de desuniones que puedan surgir en el proceso; y tercero, es indudable la necesidad de ampliar la unidad a otros sectores pero sin perder el horizonte programático que nos hemos trazado.
En el blog de esta semana creo inevitable referirme brevemente al acontecimiento político central de estos días en el país: el logro de la unidad entre Alternativa Democrática y el PDI.Tal como lo alcancé a anticipar en la semana anterior, después de varios meses de diálogos entre los compromisarios de Alternativa
Democrática y el Polo Democrático Independiente, y en contra de muchos pronósticos de ciertos sectores de la sociedad y de algunos medios de comunicación, se logró un acuerdo que permitirá a las fuerzas de las dos colectividades llegar unidas a la próxima contienda electoral en una nueva organización política denominada Polo Democrático Alternativo. Tal como lo he mencionado, éste constituye indiscutiblemente un hecho histórico para el país pues a pesar de las diferencias que existen y han existido durante décadas en el seno de la izquierda y los sectores democráticos, las circunstancias actuales han llevado a que el propósito de enfrentar el modelo que representa el gobierno actual prime sobre las diferencias históricas entre los diferentes componentes de la nueva organización.
Los retos para este nuevo movimiento son inmensos. El primero de ellos y posiblemente el más importante es el de trascender a la coyuntura. Colombia necesita una opción democrática de largo plazo que represente una alternativa real frente a los sectores políticos tradicionales y que se caracterice por dar más valor al contenido programático de sus propuestas y a sus convicciones que al afán meramente electoral de conseguir escaños en la corporaciones públicas, sin negar que desde luego ello también es necesario para consolidar nuestra propuesta. El segundo de los retos está en superar las tentaciones de desunión que pueden surgir dentro de este proceso. Estas tentaciones tendrán que ser superadas con el mismo espíritu unitario que ha caracterizado el ambiente durante el transcurso de tiempo que tomó alcanzar la unidad.
Y finalmente, el Polo Democrático Alternativo debe explorar la posibilidad de ampliar su espacio de representación pero sin que ello conduzca a desnaturalizar la alternativa que desde el punto de vista programático constituye para el país. Es imprescindible buscar aliados que se identifiquen con nuestro ideal y que contribuyan a consolidar firmemente el proceso que con alegría pudimos dar a conocer el martes de esta semana en compañía de Antonio Navarro, Samuel Moreno Rojas y Jorge Gantiva, frente a una audiencia optimista y gozosa.